Cuando llega el verano es habitual cambiar de hábitos alimenticios. Salimos más, celebramos picnics, barbacoas y, en general, comemos cosas diferentes. Desde la Clínica Dental Israel Ortiz te damos estos consejos para mantener tu boca sana, incluso en vacaciones.
Cambia el chip
Todos adoramos las patatas fritas como aperitivo en cualquier comida, pero este snack a menudo queda atrapado en el fondo de nuestra boca y termina causando caries.
Si quieres cuidar tu salud oral este verano, una fantástica alternativa a los aperitivos fritos es servir trozos de frutas y verduras crudas. Actúan como cepillos de dientes naturales, limpian la boca y estimulan la producción de saliva para eliminar los restos de comida.
Lácteos
Los lácteos como la leche, el yogur o el queso tienen pocos azúcares y son ricos en calcio y fósforo, protegiendo y fortaleciendo el esmalte de tus dientes. Estudios recientes sugieren que el consumo de lácteos previene además enfermedades de las encías.
Sin semillas
Trata de consumir alimentos sin semillas, ya que estas pueden quedarse atrapadas entre tus dientes. Si vas a comer hamburguesas o perritos calientes, evita el pan con sésamo o semillas de amapola; y sustituye las fresas y el kiwi por sandía sin semillas en tus ensaladas y postres.
Infusiones
Los refrescos son las peores bebidas para sus dientes. Deterioran el esmalte, causan sequedad de boca y tienen mucho azúcar.
El agua, sin embargo, es lo mejor que puedes beber. Para darle un toque diferente, pruébala en infusión con cualquier fruta que desees.
Ten chicle a mano
Si buscas la manera de refrescar tu boca después de comer o cenar, prueba a mascar un chicle sin azúcar. Masticar chicle sin azúcar después de las comidas durante 20 minutos puede ayudar a prevenir la caries dental. Masticar chicle sin azúcar hace que la saliva fluya y elimine los restos de alimentos. Además, combate los ácidos producidos por las bacterias que causan caries y que estropean los dientes.